Siguiendo el plan de acción que empezamos con los juegos alemanes de complementar nuestro catálogo de juegos de mesa con juegos de otros autores (y editores en este caso) hoy traemos cinco juegos nuevos de la gigante francesa Gigamic: Quarto, Quoridor, Katamino, Yogi y Panic Lab. Podemos hablar de ellos en dos grupos: los de madera y los de lata (miren las fotos para saber por qué).

Los juegos de madera son Quarto, Quorido y Katamino. Son juegos abstractos e inagotables. Como el ta te tí o el ajedrez que siempre se puede volver a jugar y nunca se agota el contenido o la diversión. Son juegos clásicos.

El quarto es un juego de mesa para dos personas. Esta diseñado por Blaise Muller. Hay 16 fichas en juego, que se pueden clasificar cada uno con cuatro atributos: Altura (alto o bajo), color (claro o oscuro), forma (redonda o cuadrada) y relleno (lisa o agujereada) y un tablero de 4 x 4. El objetivo del juego es hacer cuatro en línea con alguna de esas características. ¿La vuelta de tuerca? El que elige la ficha que tenés que ubicar es tu rival. Es un juego rápido y bastante adictivo. 

El quoridor es un juego de mesa para dos, tres o cuatro personas.  Esta diseñado por Mirko Marchesi. Cada jugador tiene un peón y el objetivo es llegar al lado opuesto. Pero cada jugador tiene también 10 barreras. En su turno el jugador puede optar entre mover su peón o poner una barrera. Quien primero llegue al otro lado, sorteando las barreras y los caminos laberínticos que se van formando, es el ganador. 

El Katamino tiene una mención especial por es un juego principalmente solitario. Se puede jugar de mas de uno, pero principalmente está pensado en solitario. Está diseñado por André Perriolat. Tiene unas fichas que nos recuerdan al Tetris y ciertamente tiene mucho de ese maravilloso juego. Vienen 500 desafíos de distinta dificultad en la que tenemos que ubicar en un espacio determinado y sin aire ciertas fichas. Hay desafíos en 2D, pero también en 3D. Es un juego que se usa mucho también en ambientes educativos para enseñar geometría espacial y construcción en abstracto. Y además es muy entretenido. Uno puede pasarse horas en desafíos complejos, sobre todo las mentes testarudas que les cuesta darse por vencido.

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Los juego de lata son el Yogi y el Panic Lab. Habrán visto que son de lata porque vienen en unas cajitas de lata muy lindas y prácticas para llevarlos a todos lado y que no se destruyan. Son juegos simples y rápidos, tipo party game.

El Yogi es ideal para jugar de a mucha gente. Y cuando digo mucha puede ser muuucha. Esta diseñado por Behrooz Shahriari . El objetivo del juego es ser el último en perder. Se saca una carta y la carta te indica qué tenes que hacer: tocarte la punta de la nariz con el dedo, poner la carta bajo el brazo, tocarte el codo con la pera, etc. Todas acciones simples y al parecer, fáciles. Sin embargo, cada acción se superpone a la anterior, es decir, en cada turno el jugador saca un carta que le indica una acción que realizará hasta que pierda e irá sumando todas las instrucciones de las cartas que siga sacando! Básicamente es un juego de mesa que logra que un grupo de personas al parecer normales devengan yogis ridículos en poses contorsionistas. Diversión asegurada. Además se puede jugar con gente de 8 a 99 años (niños incluso antes podrían participar del juego) y no hace falta ni conocerse: es una gran manera de romper el hielo con un grupo ecléctico que no se conoce mucho.

El Panic Lab es un juego de mesa de atención. Está diseñado por Dominique Ehrhard . En la mesa hay un círculo de amebas de colores, algunas cartas con rejillas y laboratorios. Hay cuatro dados. Al tirar el dado, se determina que ameba se escapo de qué laboratorio (los dados indican forma de ameba, estampado, color de laboratorio y sentido para el que se escapó). Todos los jugadores deberán encontrar la ameba escapista con las indicaciones de los dados, quien primero lo haga tomará la ameba y ganará el turno. Es un juego que muchos al principio no cazan una, y en dos segundos ya lo entendiste todo. Suele ponerse un poco reñido y ruidoso…